Hay quien prefiere utilizar un buen portaminas para el día a día. Sin embargo, el producto del que hablamos en esta ocasión produce verdadera fascinación a muchas personas: los lápices de grafito.
En este artículo hacemos un minucioso análisis de cinco marcas de lápices de grafito de buena calidad pero poco conocidas.
Características de los lápices de grafito
Su textura exterior suele ser lisa y suave, ya que por encima de la pintura suele ir barnizado con una fina capa de esmalte brillante. Sin embargo también existen lápices con barniz mate, por ejemplo en algunos Faber-Castell, un barniz muy ligero basado en agua te permite incluso apreciar la textura de la veta de la madera.
Si pasamos la mano suavemente por la cara en la que están impresa la marca del lápiz y podremos escuchar el sonido que produce. La impresión, el tallado y el relieve de la tipografía también varían de unos lápices a otros.
En la punta (la afilaremos si no está bien puntiaguda) podemos observar la huella que deja la cuchilla del sacapuntas en la madera. Las marcas revelan cómo ha sido afilado el lápiz: sólo el afilado de fábrica es completamente homogéneo. Al afilarlos a mano suele quedar una marca más pronunciada en el lugar donde hemos detenido el corte.
Además si el giro del lápiz no ha sido hecho con uniformidad la distancia entre sus líneas se ven desiguales. Especialmente si lo hemos afilado aplicando demasiada presión.
En cuanto a la forma, hay quien prefiere los lápices hexagonales a los triangulares o cilíndricos.
Faber-Castell Goldfaber 1221
El Goldfaber 1221 de Faber-Castell es un lápiz hexagonal de grafito indicado para dibujar, escribir y hacer bocetos. Faber-Castell lo fabrica en doce grados de dureza. Es inconfundible por el diseño de sus caras pintadas en color azul y oro y recubiertas en barniz brillante. Como suele ser habitual en los lápices de Faber-Castell la madera está hecho con madera ecológica certificada, y su mina resiste bien a la rotura gracias al encolado SV.

El Goldfaber 1221 es un lápiz que no está disponible en todo el mundo. Aunque es de buena calidad (la madera es de cedro y la mina es bastante resistente) es un lápiz menos conocido que los famosos lápices de grafito Faber-Castell 9000. Al igual que los Faber 9000 son los equivalente a los Staedtler Lumograph, el Goldfaber 1221 es la alternativa que Faber-Castell ofrece frente al Noris 120 (el Staedtler amarillo y negro de toda la vida).


Lápices Staedtler Tradition 110
Lapicero Nº110 de la marca Staedtler, el Tradition es un lápiz que me llamó la atención por sus colores: rojo y negro. El diseño recuerda al del Staedtler Noris (el negro y amarillo de toda la vida).
Este lapicero tiene un grosor de mina de 2 mm y al igual que el Goldfaber está disponible en 12 graduaciones de mina. Sin embargo, el barniz de este lapicero es algo menos brillante, el diseño del terminal también coincide con el del Noris.
La fórmula del grafito y su sistema de encolado le confieren una elevada resistencia a la rotura. Un buen lápiz válido para todos los campos: dibujo técnico, escritura, esbozos, etc. El Staedtler tradition 110 es un lapicero fabricado en Australia.

Lápices Koh-I-Noor Hardtmuth Toison D’Or
Desconocidos para muchos, a pesar de ser una marca con más de doscientos años de antigüedad. Esta marca de lápices fue fundada en Austria por Joseph Hardtmuth, el inventor del lápiz. También invento otros productos como la porcelana de Viena (un tipo especial de barro con pintura libre de plomo).

Como no podía ser de otra manera—son los inventores del lápiz—el catálogo de productos de Koh-I-Noor es gigante e incluye lápices de todo tipo: para diseñadores, arquitectos o ingenieros, artistas, escritura en general, etc.

De sus diferentes lápices, uno de los más conocidos son los Hardtmuth Toison D’Or. Estos lápices, famosos por su diseño hexagonal en color negro contienen una mina de grafito de alta opacidad resistente a la luz y fácil de borrar. Son ideales para ilustración, dibujos y bocetos. Un lápiz resistente y duradero que se fabrica en doce graduaciones de mina y se puede comprar en estuches metálicos con las doce durezas. El tipo de madera utilizada permite un afilado preciso de la mina.
Lápices Cretacolor Fine Art Graphite
Cretacolor es un fabricante austriaco de lápices especializado en productos para artistas. Sus lápices de grafito Fine Art Graphite los puedes comprar en nada menos que 20 durezas diferentes de mina. Su estuche metálico de 24 lápices incluye uno de cada dureza más un segundo lápiz de las más utilizadas: 2B, H, HB y H.

Los lápices Cretacolor tienen un diseño extremadamente simple: forma hexagonal, barniz brillante de color rojo inglés y un terminal de color gris muy intuitivo que es más oscuro cuanto más blando es el lápiz: una excelente idea que permite distinguir rápidamente los lápices duros de los blandos cuanto acaban esparcidos por la mesa.
Lápices de grafito Lyra ArtDesign 669
Es difícil diseñar un lápiz más minimalista que los Lyra ArtDesign 669. Un lapicero hexagonal pintado de negro en su totalidad, ni siquiera el extremo del final es de otro color.
El Lyra 669 está decorado con pequeño anillo de color blanco y la inscripción de la marca y la dureza también en letras blancas.

Los lápices de grafito Lyra ArtDesign también se fabrican con doce graduaciones de dureza:
- Mina extra dura: especial para dibujo técnico en oficinas de ingeniería y arquitectura
- Mina dura: para la escritura en general y el dibujo artísticos
- Mina blanda: para diseñadores, artistas y dibujo técnico
Para mí Staedtler es la mejor.
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